lunes, 29 de diciembre de 2014

Soñé...


Soñé que era un ser de luz... Soñé que mi humanidad se había desvanecido, que era libre una vez más, que no había sufrimiento ni dependencia...
Soñé que ya no era densa, que había regresado, que era luz pura y limpia, sin mancha ni temor...
Soñé que todo había sido un sueño, tantas vidas, tantos misterios para recordar lo que ya era, siempre fui y sigo siendo...

Y en ese otro sueño soñé que estaba en un sitio oscuro, perdida, angustiada y llena de complejos por un tiempo, hasta que entonces resplandecí y me dí cuenta de la verdad...
Soñé que era una niña, joven, adulta y anciana, con ganas de vivir cosas nuevas, olvidando que ya yo lo sabía todo...
Soñé que quería ser hada, tener poderes sobrenaturales y convertirme en maga, sin saber que ya en el fondo también lo era...
Soñé que lo había perdido todo, que mi corazón estaba solo, cuando tenía la compañía de tantos ángeles y seres de luz, pero es que estaba ciega por las ataduras de la mente...
Soñé que no era lo que soy, fue un sueño largo y absurdo, con distintas caras, cuerpos, amigos, enemigos y familiares...
Soñé con tanta tristeza y desolación, pero también con ilusiones y un raro concepto de amor...
Soñé que necesitaba alguien que me complementara y buscando entre la basura me llegué a perder...
Soñé de todo un poco y ahora entiendo el por qué... En ese sueño iluso me logré convencer que no existe nada más hermoso que la Verdad de mi propio SER: Una llama radiante que jamás quiero volver a perder...

martes, 2 de septiembre de 2014

¿Tomártela en serio o no?

Mi perrito Google, mi maestro. Uno de tantos.
Solemos hacer girar nuestra vida en torno a nuestro trabajo o estudios olvidando que lo mejor es hacerla girar en torno a nuestra propia existencia y lo que nos rodea. Viviendo a plenitud en armonía con nuestro entorno.

Las mascotas nos lo demuestran, viven día a día con el mismo entusiasmo de vivir aunque no tengan trabajo o la seguridad de que les vas a poner comida cuando tengan hambre. No ves a un perro angustiado porque no sabe si su dueño le va poner comida mañana, él solo vive el presente y disfruta su magia. Así mismo debemos hacer nosotros. No quiere decir que no hagamos más planes a futuro, pero al menos hacer que nuestra mente viva el presente mientras planifica el futuro o perdona algo del pasado. No es fácil, lo sé... Pero es la mejor solución para ir eliminando el sufrimiento de nuestras vidas. La verdad, es que al final todo en este planeta es superficial, bien seas un aclamado político o un famoso escritor o un don "nadie"... Todos tenemos un aprendizaje y crecimiento interior a través de estos papeles que jugamos. Es por eso que a veces pienso en dejar de tomarme la vida tan en serio; si no consigo trabajo; si puedo comprar esto o aquello; si no puedo irme de vacaciones a Bora Bora; o sea lo que sea; puedo respirar, puedo vivir y descubrir que mi potencial es interno, y que se descubre en el silencio de mi habitación. Solo tengo que tomarme en serio aquello que me hace feliz y me hace mejor persona, solo eso. Puedo usar mi imaginación y crear realidades solo por diversión. Y si hoy soy mejor persona que ayer, con eso me basta; y así casa día.

¿Suena fácil? entonces a ponerlo en práctica.

sábado, 30 de agosto de 2014

Gnosis, pensamientos e instantes


No sé quién soy aunque si sé lo que pretendo ser...
Estoy en un país lejano al mío, donde pretendía encontrar hadas...
Donde las hadas se presentaron en forma de retos y arco iris dobles...
Estoy sola tomando té y explorando mis pensamientos...
Tengo tantos pensamientos como estrellas tiene el firmamento...
Y a veces me pregunto si realmente soy eso que pienso...
Porque cuando pienso me pierdo del instante presente...
Me olvido de mi misma y muero por unos minutos, a veces horas...
Muero porque ya no estoy acá cuando pienso...
Los pensamientos vienen y van sin pedir permiso...
A veces ni recuerdas que fue lo último que pensaste...
Otras veces andamos en piloto automático olvidando nuestra presencia...
Cuantas veces no tomamos un baño sin la conciencia del momento...
Actuamos en base a ellos y nuestra vida gira en torno a ellos...
Estamos tan conectados con nuestros pensamientos que creemos ser ellos...
¿Y por qué no? ¿Si es lo único que nos acompaña día y noche verdad?
Es cierto... pero por alguna razón son motivo de nuestro sufrimiento...

Los gnósticos dicen que debemos eliminar los valores agregados que se manifiestan como pensamientos (afectándonos generalmente de forma negativa). No sé si sea posible pero lo estoy intentando, y cada vez me doy más cuenta que estos pensamientos me quieren dominar la vida a través del miedo y muchos más aspectos negativos del Yo/Ego que todos compartimos. Así que el objetivo es usarlos solo cuando sea necesario y preferiblemente cuando los haya logrado educar para que trabajen a mi servicio. Por lo cual tengo que estar alineada con mi propósito divino o misión de vida. ¿Nada fácil verdad?

Cuando los puedo observar me doy cuenta que hay algo más en mí que puede detallarlos sin involucrarse. Los gnósticos y budistas consideran que ésta es la verdadera escencia de nuestro ser. Presencia pura. Los pensamientos son solo creaciones, que en nuestro caso humano han sido utilizados de una manera predominantemente negativa.

Muchos creen que el ego está relacionado solamente al orgullo o a la vanidad. En realidad el ego es un conjunto de valores agregados como miedo, celos, inseguridad, rabia, frustración etc. Es decir, todo aquello que nos hace sufrir en secreto tratando de proteger nuestro Yo (a veces tan dormido que ni le reconocemos). Un Yo creado o hasta idealizado por la mente. Un Yo que no es real porque está basado en conceptos mentales. Un Yo que nos hace sufrir por creer que no refleja lo que la sociedad sugiere aunque nosotros mismos le hayamos dado la validez para hacernos daño. Un Yo que muere cuando el cuerpo muere, llevándose consigo la personalidad y dando lugar a una nueva composición de valores agregados en otro cuerpo. Lo que llaman transmigración, que a mi Yo en particular le da miedo, pues sabe que representa el fin de su existencia. 

Todos somos uno, pero esos valores agregados siguen merodeando hasta que logremos transformarlos en energía limpia. Esa es nuestra misión. Elevarnos por encima de ellos y ayudar con el plan cósmico hasta que logremos despertar y recordar toda la historia que se manifiesta dentro de un instante, dentro del mismo origen, dentro de la mismísima fuente de vida.

PD. Lo arriba expuesto son solo suspiros de la mente. Vale destacar que pueden provenir de algunos de mis egos o valores agregados. Solo espero que se cuele un poquito de la verdad original y sirva para explicar un poco más sobre el misterio de nuestra existencia.