sábado, 29 de diciembre de 2012

Entendiendo el presente. Aquí y Ahora

El Presente posee, para afrontar el estudio de la naturaleza No-dual, condiciones inigualables que ningún otro contenido cercano al análisis racional posee. El Presente sirve de cimiento al edificio intelectivo que intenta descifrar la esencia primaria de la existencia humana.

El Presente es en sí mismo continuo, es decir, no se aprecia en él alternatividad de su condición natural. El Presente es el escenario donde se sostienen los innumerables acontecimientos que se suceden. Lo que se sucede a cada momento ocurre siempre en un Presente irrepetible.


El Presente se asimila a la temporalidad que se suele denominar como ‘el aquí y el ahora’. Cada acontecimiento que se está sucediendo florece en el Presente. La cognición de cualquier Objeto del Presente se realiza sin esfuerzo volitivo por parte del Sujeto. El ‘yo’ no requiere esfuerzo para percibir el Presente, la mente lo atrapa espontáneamente, pues sin necesidad de ser evocado aparece por sí mismo.

El Presente posee magia. Ilumina como real todo contenido que en él emerge y ofrece a los contenidos experimentados un brillo de existencia que ninguna otra circunstancia en la naturaleza puede otorgar. Cada instante de Presente contiene todas las cosas que existen; ello hace que su poder sea incalculable.

El Presente no posee límite alguno, no existe manera de delimitarlo; inclusive no existe manera de circunscribirlo. Su simpleza y complejidad se conjugan en el hecho de no necesitar definirse para experimentarlo.


El Presente fluye continuamente por doquier y participan de su condición tanto las montañas como los animales, e inclusive las lejanas estrellas. No se fragmenta, su uniformidad es evidente. A nadie prefiere, su condición se reparte homogéneamente entre todos los acontecimientos que arropa.

La condición del Presente es indefinible. No hay Objeto alguno a través del cual sea posible entender su naturaleza íntima. Ni la comparación ni la inferencia ni la relación con otro ente cualquiera sirven como punto de referencia para entender su naturaleza.

El Presente es la base sobre el cual fluyen todos los acontecimientos que se están sucediendo. Desde la miope óptica mental, ambos se notan diferentes: Presente y acontecimientos que se suceden. Inicialmente se profundizará sobre esta dualidad existencial para posteriormente, a lo largo de la presente obra, concluir la falsedad de la diferenciación.

La Paradoja Divina    Sesha 2002 -  http://www.sesha.info

miércoles, 4 de julio de 2012

Locura empedernida...


Cómo es que estamos tan alejados de la realidad... Cómo es que el mundo sigue girando con tanta pena, con tanto dolor... Cómo es que sufrimos por no tener plata para comprar cosas de última moda o tecnología... Cómo es que estamos en guerra y todavía sigue existiendo anorexia por la crisis social de la belleza... Cómo es que estamos tan ciegos ante la verdad... Cómo es que no podemos hacer nada y seguimos viviendo este tipo de vida... Cómo es que nos quejamos tanto... Cómo es que sufrimos de celos... Cómo es que nos obsesionamos con tonterías... Cómo es que alucinamos con cosas que realmente no importan... Cómo es que nuestro ego se crece y rebaja tanto a la vez... Cómo es que lloramos sin saber que otros lloran por cosas más profundas, más terribles, más increíbles... Cómo es que la pronografía se ha hecho tan famosa... Cómo es que los niños se están afectando de todo esto... Cómo es que se nos acabaron las ganas de cambiar el mundo porque ya está dañado... Cómo es que una sola persona hace la diferencia... Cómo es que hay tanto por hacer... y vamos tan lento...

miércoles, 7 de marzo de 2012

"Valoración Personal" un arte por descubrir...

Pintura de Leonid Afremov
La valoración personal es una de las grandes necesidades humanas, no se trata del aspecto físico que tenemos, ni de cuánto llamamos la atención por nuestro cuerpo, ropa o maquillaje en el caso de las mujeres, ni tampoco de las pertenencias, ni del poder que ejercemos sobre otras personas o territorios, se trata de una valoración personal por lo que somos, no por lo que aparentamos ser o tener. Ya que todo lo que ven nuestros ojos superficialmente, no es mas que una bana ilusión, es como ver un cascarón adornado de distintas maneras, pero si lo abrimos, encontraremos su verdadero contenido, que dista mucho de lo que podría estar aparentando externamente. 

El ego se encarga de cuidar la imagen que tenemos de nosotros mismos, desde pequeños se ha ido formando según los conceptos que otros han inculcado sobre nuestro valor personal, comenzando con los que nuestra propia familia señalaba, y posteriormente con lo que nuestras amistades incorporaban. Así, el ego de un adulto es el resultado de las opiniones y prejuicios de otros, hasta que hace conciencia de sí mismo más allá de las apariencias.

Me atrevería a decir que en la actualidad existen cuatro categorías de valoración personal, que no son necesariamente fijas, ya que en ocasiones podríamos reflejar valoración uno, y en otras, dos, tres o cuatro... El dilema está en detectar en qué categoría nos encontramos más a menudo.
  1. Los que se creen superiores y pisotean a los demás o son irónicos. 
  2. Los que se creen inferiores a los demás y se auto-critican constantemente.
  3. Los que se creen inferiores a los demás pero compiten para no demostrarlo.
  4. Los que no se creen ni inferiores o superiores a los demás, viven felices sin compararse con nadie.

Pintura de Leonid Afremov
Estas categorías no son más que patrones mentales programados en nuestra mente desde muy niños... Dejar de sufrir a causa  de los mismos es un trabajo de vida. Todos estamos expuestos a este condicionamiento social, bien sea por los matices de belleza, poder o posesiones que nos inculcaron tener para ser importantes. Pero la verdad es que nada de lo material es real, todo es una ilusión mental que cuando fallecemos se desvanece, simplemente pasamos a otro plano y volvemos a ser energía buscando ascender la materia. Cuando caemos de nuevo en un cuerpo físico y mental, recibimos nuevamente todos los condicionamientos sociales, hasta que por fin, después de repetir el proceso una y otra vez, logramos hacer conciencia de lo que está ocurriendo, y comienza la sed por evolucionar y elevarnos por encima de nuestras debilidades humanas, superando el miedo, la angustia, celos, ira y rencor en nuestra vida... Pero nos damos cuenta que no es fácil y algunas veces desistimos, otras tantas lo logramos y eso nos da fuerzas para continuar.

Si logramos estar en la categoría cuatro más a menudo, podremos ser felices, y a su vez haremos felices a los demás en todos los aspectos, pues si no nos comparamos con nadie, seremos lo que somos, no lo que la sociedad nos inculque, ni lo que nuestra familia o amistades quieran que seamos, ni siquiera seremos lo que nuestra mente cree que es... seremos una energía que se conoce tanto así misma que no necesita ser definida por nada ni nadie, ya que por si sola, lo es Todo!

No conozco la clave para lograrlo, pero creo que se comienza escuchando el silencio de tu Yo Interior, enseñando a tu mente con paciencia y amor que no hay motivos para compararse con nadie, ni siquiera con la excusa de lograr una meta similar a la de alguien, mucho menos si te causa dolor, pues debemos ser originales hasta con nuestros sueños y aspiraciones!

Si te vas a comparar, hazlo contigo mismo, supérate en base a tus características personales, eres único e irrepetible. Si alguien te inspira, que sea para iniciar tu camino de evolución, pero una vez que arranques, comienza a construir tu propio sendero. Y anímate, somos muchos haciendo la misma tarea, aunque no lo aparentemos...

Descubre el gran maestro que hay en ti