martes, 5 de abril de 2011

No basta, fue tu elección...


No basta con estar todo el día en una oficina, jugando el papel de adulto responsable, ocupándote de problemas que ni siquiera son tuyos... Es verdad, por eso te pagan, por eso estudiaste, fue tu elección...
No basta sentarte frente la computadora 8 horas de tu vida, para llegar a casa agotado con la mente colapsada de problemas por los que te responsabilizaste, bajo la presión de uno o varios jefes, fue tu elección...

No basta con cumplir las metas y objetivos, también debes cumplir un horario estrictamente, si respiras unos minutos más fuera del aire laboral dentro de tus horas laborales, estás cometiendo un delito, fue tu elección...

No basta trabajar la semana entera, si no que debes asistir a cualquier evento extra-curricular solo por compromiso de equipo, cuando lo que quieres es irte a tu casa a hacer lo que te venga en gana, fue tu elección...

No basta con dar lo mejor de ti mismo, debes entregarlo todo para que la organización salga adelante, como si eso resolviera tus problemas de vida, para lo único que sirve es para mantenerte financieramente bien dentro de lo que cabe, porque tampoco serás millonario encerrado en cuatro paredes a sueldo fijo y con "beneficios", fue tu elección...

No basta tener un halago hoy por tu trabajo, porque mañana serás sancionado ante el primer error, y cuando hablo de sanción no me refiero necesariamente a golpes ni amonestaciones específicas, si no a miradas, gestos y llamados de atención, fue tu elección...

No basta, nada basta, fue tu elección, fue la elección que tomaste cuando no sabías que camino tomar porque la escuela te formó para ser empleado, de una organización "bondadosa" o de una empresa que "se interesa por tu crecimiento" pero al final de cuentas fue tu elección....

Ya basta... No fue mi elección

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